En un trágico e insólito accidente, un hombre atropelló y mató con su auto a un ciclista que iba por la Panamericana, pero en lugar de parar siguió andando 17 kilómetros con el muerto sobre el capó del auto. Recién lo descubrieron cuando llegó a un peaje y allí lo detuvieron.
El extraño caso ocurrió el domingo, a las 6,30 de la mañana, a la altura del kilómetro 52 de la Panamericana. La víctima, Reinaldo Rodas tenía 53 años y trabajaba coimo vigilador de la empresa Watchman. Con su bicicleta playera iba por el carril lento de la autopista hacie el country Mapuche, de Pilar.
En ese momento, por causas que aún la Policía no pudo determinar, un Peugeot 504, que manejaba Pablo Daniel García, de 28 años, atropelló a Rodas, lo que le provocó la muerte inmediata del vigilador. Pero lo lamentable fue que el cuerpo del ciclista se incrustó contra el parabrisas del auto, del lado del acompañante y quedó tendido boca arriba con la piernas sobre el capó.
Lo soprendente fue que el conductor siguió su marcha sin parar durante más de 17 kilómetros, hasta que llegó al peaje de Tortuguitas. Cuando la empleada del puesto vio la imagen se horrorizó. "Señor, usted lleva un muerto ahí ¿no lo ve?", dicen que le dijo a García. Y enseguida llamó al personal de seguridad que demoró al conductor hasta que llegó la Policía.
El conductor quedó detenido en la comisaría 7a. de Lagomarsino, acusado de "homicidio culposo" (cuando se comete sin intención). pero el lunes fue liberado porque se trata de un delito excarcelable. La sospecha es que el hombre podría haber estado manejando el auto bajo la influencia de alguna sustancia tóxica.
"Nadie puede creer lo que pasó; Cacho (como lo conocían a Rodas) era una persona excelente y nadie no explica qué fue lo que pasó ni por qué dejaron libre al asesino", dijo Fabián, cuñado de la víctima al diario MUY. Y agregó: "acá quedó una mujer sin marido y un pibe sin papá; queremos que se haga justicia".
Fuente: Clarín (Argentina)
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