Yassir Hassan, el pasado viernes conducía en estado de embriaguez cuando fue interceptado por la policía, que tras detenerle procedió a un minucioso examen del vehículo.
Durante el registro, fueron encontradas varias botellas de vino y otras 3 que contenían la orina del muslim. Sin embargo, lo más sorprendente es que una de las botellas llenas de las micciones de Hassan, se hallaba en el congelador donde se almacena el helado.
Todo hace suponer que Hassan, en su urinario móvil, realizaba mezclas contrarias a la salud pública, de la que eran víctimas los infieles, sin distinción de edad ni sexo.
Tal vez, exista alguna sura, aleya o hadiz donde se encuentre una justificación a su acción, sin embargo, estar en posesión de bebidas embriagadoras y llegar a la triste condición de beodo, no es halal (lícito) sino haram (ilícito) según el Corán y toda la Tradición Profética mahometana.
Hassan, de 46 años y gran aficionado a la botella, se encuentra en libertad bajo fianza, pese a haber suministrado a la población una mercancía contaminada.
Fuente: Minuto Digital (España)
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